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Este Museo es una institución estatal chilena, construido desde 1908 en la vereda norte de la Plaza de Armas, su función es dar a conocer a la comunidad nacional, los hitos históricos y recrear la historia de nuestro país, para que a través de esto se pueda reconocer el patrimonio tangible e intangible que constituye la memoria histórica de Chile.
Este cerro representa el estilo de vida de la alta sociedad del siglo XIX, fue intervenido con grandes áreas verdes, plazoletas, un camino de circunvalación, miradores, estatuas, fuentes, etc.
Flor Chilena "El Copihue"
Es la flor nacional de nuestro país, se puede encontrar desde Valparaíso a Osorno. El copihue es una flor autóctona chilena, que florece desde el verano hasta finales del otoño. La leyenda dice que su nombre nace de una trágica historia de amor entre jóvenes mapuches de tribus rivales.
En 1922 compran un muñeco mecánico que fue colocado en la vitrina del local, para que con el golpeteo de su puntero atrajera la atención del público que pasaba por la calle.
Junto con lograr su objetivo principal, sirvió para que el público lo utilizara como punto de referencia para encontrarse en el centro, aludiendo al golpe que da el muñeco en el vidrio, (juntémonos "donde golpea el monito"). A esta costumbre popular se debe el actual nombre de la tienda.
Es un buque fantasma que navega por los mares de Chiloé. Poderosos brujos conforman su tripulación, la que sólo navega por las noches, nunca de día. Las personas que han muerto ahogadas son recogidas por este barco desde las profundidades del mar para ser acogidas en la vida eterna.
La embarcación brinda hogar a aquellos que han naufragado, pero no es igual de gentil con aquellos que se han atrevido a dirigirle la mirada de frente.
Es una criatura con características de demonio que se encuentra presente en la mitología chilota. Se le conoce como aquel brujo, chico y feo que pasaba encaramado sobre los árboles a la espera de alguna jovencita que daban un paseo por el bosque. Ante la mirada del Trauco, las niñas se quedaban cautivadas ante sus ojos y caían en un profundo y alucinante sueño de amor. Al despertar, se daban cuenta de que “algo” ha ocurrido en sus cuerpos y corren a sus casas a contarle a sus padres de que han sido víctimas del “hechizo” del Trauco.